Memoria del curso Mística y paz

Del 19 al 21 de septiembre se ha desarrollado en la sede de la Universidad Menéndez Pelayo de Valencia el Seminario “Mística y paz” patrocinado por la Fundación Fernando Rielo y con la colaboración de la Fundación Idente de Estudios e Investigación.

Partimos de que la mística no es una abstracción sino que ha de estar encarnada en la vida de la persona humana y en todas las dimensiones en las que esta se desarrolla como tal. Desde su misma constitución; su dimensión trascendente; su dimensión relacional; su compromiso vital, que abarca una salud integral, una necesidad de formación, un compromiso social, un compromiso ecológico y un desarrollo creativo y científico, etc. En todas estas dimensiones de la persona humana hay muchos ámbitos a desarrollar que requieren tener muy claros los fundamentos en los que estamos asentados y un planteamiento serio de las grandes preguntas que el ser humano se hace.

Todo ello unido a la convicción de Fernando Rielo sobre el valor de una cultura trascendente para lograr el fruto de la paz: “Tengo la convicción que sólo el camino de la cultura puede conducir, nutrida por una renovada elevación moral, a una paz creadora; fruto de ésta, una revelación más nítida acerca de nuestro maravilloso destino. Los seres humanos estamos temporalmente en el espacio, pero no somos ciudadanos del espacio: nuestro origen es celeste.”  (Discurso de Fernando Rielo en el acto de entrega del V Premio Mundial de Poesía Mística en 1985 en la sede de la UNESCO en París)

En el acto de inauguración y presentación del curso en el que estuvieron presentes: Agustín Domingo Moratalla, Director de la Universidad Menéndez Pelayo de Valencia, José Mª López Sevillano, Presidente de la Escuela Idente (Fundación Idente de Estudios e Investigación) y Juana Sánchez-Gey Venegas, profesora de la Universidad Autónoma de Madrid y Directora del Aula de Pensamiento de la Fundación Fernando Rielo, como Directora del curso. Se destacó el estudio de la espiritualidad como parte integrante y fundamental en la formación de la persona.

El anhelo de paz en todo ser humano, en estrecha relación con la Mística. Enriquecimiento en la vida cultural: universidad pública en la ciudad de Valencia abierta a hablar de mística, religión, espiritualidad. Los místicos, constructores de Paz. La religión hoy es identificación con las profundidades del alma; nunca identificación con intolerancia o fundamentalismo.

Juana Sánchez-Gey inicia conferencia en curso Mística y Paz y habló de Paz, alteridad y diálogo La paz es una conquista que debe alcanzar el ser humano. La paz no llega por pensarla o hablar mucho de ella, sino por esforzarnos en vivirla. Dice Fernando Rielo: Concepción mística de la antropología. El ser humano es un ser místico. Ser persona significa ser definido por el Absoluto. Nuestro primer vínculo relacional es la presencia del Absoluto en el humano. «No hay camino para la paz. La paz es el camino»

Según Fernando Rielo «la paz convoca al éxtasis».  Rielo define el éxtasis como energía del espíritu que impulsa a salir de sí mismo. El diálogo para Fernando Rielo, arranca del mismo concepto de persona, como seres místicos, seres relacionales. Para Rielo el espíritu es percepción y comunicación, es consciencia potestativa. La Mística es el acto de Dios en el hombre con el hombre. Acto teantrópico: Dios actúa en el hombre, y el hombre acoge ese acto que le transforma. La paz coexiste con el conflicto, entendido éste como diferencia. El problema surge cuando en el conflicto hay violencia, intento, imposición de criterios. La mística es más que un lenguaje, peto es siempre comunicación

La siguiente conferencia ha sido de Agustín Domingo Moratalla, Valores de la familia para la construcción de la paz. ¿Por qué nos preocupa la familia?  La familia como algo sólido frente a la sociedad líquida. Es la institución más valorada pero menos cuidada.

Modelos de Familia / Modelos de paz Familia pre-moderna: pax «romana» 1. Patriarcal y autoritaria. Derecho 2. Estabilidad de las relaciones 3. Familia como clan

Familia moderna: pax «burguesa» 1. Igualdad «formal» de individuos 2. Contrato privado entre parte 3. Espacio de interés y bienestar 4. Modelo capitalista: propiedad 5. Modelo socialista: masa (nosotros-estado)

Familia postmoderna:pax «liquida» 1. Unidad de consumo y bienestar calculado. 2. Modelo funcional: socializar, sin educar o instruir. 3. Espacio de amparo y cuidado «a la carta» 4. Zona de vínculos 5. Primacía de una comunicación interesada. 6. El desafío de las familias mixtas.

Nuevos retos: ¿familia sin fronteras? 1. Pluralidad y complejidad de modelos 2. Ingeniería reproductiva y crisis de «identidad» familiar 3. Envejecimiento 4. Privatización del derecho de familia 5. Patologías de incomunicación, soledad y aislamiento

Los cambios no son accidentales sino sustanciales. Cambios en instancias educativas: Escuela calle Iglesia televisión Lectura música Familia noche. Un modelo narrativo de hacer las paces 1. Pensar la polis desde la familia y no al revés. 2. Vigor y Posibilidad de comunicación. Un modelo narrativo de hacer las paces. Del «hogar» a la «casa común». La Familia es Comunidad de memoria, olvido y perdón y es el espacio de convivencia, equipo de solidaridad sin cálculo; fusión, no confusión.

Después habló Antonio Camaró sobre Arte para la paz.  Busca lo sublime y eso se expresa con lo más puro. Es la inocencia de los niños con la que quiere expresarse, con la que quiere pintar. Dijo Camaró: «Amo al ser humano, y busco su esencia: la belleza». El artista ha de ser un hombre comprometido, que busque el diálogo. El hombre necesita ser amado y amar. El amor tiene que ser motor del perdón. El verdadero arte es el que tiene que cambiar el interior del ser humano.»El verdadero arte es el que cambia el tejido interior para cambiar el mundo». Para que haya paz, el hombre tiene que conocerse a sí mismo. No hay relación con el otro si no desea la unidad. No hay experiencia verdadera cuando la persona se centra sólo en lo particular, sino cuando se piensa en los demás. Uno habla del arquetipo del monje, cuyo objetivo máximo es unificarse; en cada uno de nosotros hay un monje que intenta unificarse en su relación con el Otro. Es muy importante que el entendimiento entre las religiones se haga a través de la mística. La persona no puede vincularse consigo mismo, sino con el otro, con su familia. Si el hombre no vive su relación con Dios y no va puliendo así su interior con esa relación, está perdido.

La conferencia del día siguiente empezó con la charla ¿Cómo es posible vivir la paz ante el dolor? impartido por Lourdes Martínez y José Luis Guinot

¿Cuándo alcanzaremos la paz? Cuando respondamos ante el dolor con alegría, esperanza, gratitud, etc. Siempre podemos cambiar nuestra actitud. Hay 6 actitudes ante el sufrimiento: Huida, amenaza (miedo y angustia), derrotista (ya no queda nada por hacer), que no es verdad, resignación (como aguante), todas las anteriores son negativas; y las positivas: desafío (reto), y aceptación (es cambiarme a mí mismo y lograr paz). Tenemos que aprender a vivir el amor en vez de la ira; a sentirnos vulnerables pero confiados; a no sentirnos culpables sino responsables. Somos capaces de lograr la paz un poco cada día. El dolor hay que vencerlo con amor. La experiencia mística es la más transformante respecto al dolor a través del amor. Entiende que en vez de huir del dolor, podemos acercarnos al dolor de los demás. El dolor es una alerta de que hemos perdido nuestro equilibrio físico, ante esto hay que responder, poner remedio. El dolor no desaparecerá nunca, pues somos seres en evolución, en contacto con otras personas. Rechazar el dolor es un absurdo ante la realidad de una situación de dolor que no se puede cambiar, sólo existe una actitud para alcanzar la paz: la aceptación del dolor. La paz es una conquista que hay que realizar día a día; una paz completa que se consigue con el amor: olvidándose del propio dolor para acompañar al otro en su dolor. No huir del dolor, sino buscarlo, no en actitud masoquista, sino ir al encuentro del dolor ajeno, que nos ayudará a transformar el dolor del otro y el mío. La mística y la paz están íntimamente unidas: la paz es una de las manifestaciones de Dios en nuestra vida: hacer frente al dolor -inevitable en nuestra vida- con el amor. Hay que aprender a transformar el dolor con el amor. El amor se vive no se piensa únicamente.

Lourdes Martínez habló de Viktor Frankl. Frankl se quedaba con el enfermo que ya no tenía solución médica pero todo tiene sentido y si sabemos el para qué tendremos el cómo. Hay que sentirse interpelado por la vida, ahí encontraremos la respuesta para las situaciones de dolor. Frankl dice: en lo espiritual que somos tenemos una fuerza de obstinación del espíritu. Tenemos una mochila completa, hay que sacar aquello que nos hace saber ayudar a escuchar el dolor de los demás. Para encontrar la paz ante el sufrimiento es necesaria la voluntad de afrontar ese sufrimiento. Siempre hay algo que se puede hacer. La única finalidad de la vida es crecer, es amar. La paz está en el horizonte de la paz. Hay que trascender, dejar de ser oruga para ser mariposa. El duelo se puede ver como un castigo o como un camino. Hay que estar atentos a las señales. La libertad humana es ‘libertad para’. El hombre está designado para mirar a lis otros no para mirarse a sí mismo.

La siguiente conferencia ha sido dada por Dr. José Máximo Lledó, Director de la Cátedra de la Caridad Santo Tomás de Villanueva de la Universidad Católica San Vicente Mártir de Valencia  Caridad y paz en Santo Tomás de Villanueva.

Narró datos de la biografía de Santo Tomás de Villanueva. Su vida se desarrolló en la época de más brillo del imperio español. Y destacó como renunció a muchos de los privilegios de su obispado. Vivió un severo espíritu de pobreza y una especial dedicación a pobres. Como obispo Santo Tomás de Villanueva hizo una gran renovación de su diócesis. Tenía inmensa devoción por la Eucaristía. Santo Tomás de Villanueva fue precursor de Cáritas. En amplias tareas asistenciales y formativas. Era muy recto, severo en lo que no se puede permitir, pero misericordioso con la fragilidad humana. La mayor pobreza es no poseer a Dios. Están trabajando para que se nombre Doctor de la Iglesia. Terminó con unas palabras de Quevedo alabando a Santo Tomás de Villanueva.

La última conferencia de la mañana ha sido de Rocío López González. Directora de la Fundación Pluralismo y Convivencia: El encuentro interreligioso como camino para la paz. Expresó la misión de la Fundación Pluralismo y convivencia. Habló después de las distintas minorías religiosas, que han firmado acuerdos de cooperación con el estado. Son tres: Protestantes, Musulmanes y Judíos Después están: los mormones y los testigos de Jehová y los budistas. Forman expertos en diálogo religioso. Hacen programas musulmanes para evitar el radicalismo religioso. Tratan de facilitar los programas de diálogo interreligioso. Es un camino importante para lograr la paz. Dialogando se camina hacia la paz. El Papa Francisco es el líder religioso que más ha movido esto. Pero no puede ser en un espacio neutro sin relación con la trascendencia, sino cada uno con fidelidad a sus creencias.

Por la tarde tuvimos una mesa redonda: Educar para la paz. Moderada por Juana Sánchez-Gey. También estaban presentes Agustín Domingo Moratalla, director, Cátedras UNESCO para la Paz y el Desarrollo, Carmen Llera-Catalá, Cátedra Unesco para el Desarrollo de la Universidad de Valencia, Ascensión Escamilla Valera, miembro del Patronato de la Fundación.

Yolanda Ruiz habló de Scholas Ocurrentes y su modelo pedagógico; que está basado en el modelo educativo del papa Francisco. Basada en la doctrina social de la Iglesia y el humanismo cristiano. Para trasformar la realidad desde la comunidad educativa, propiciando un nuevo espacio y nuevos estilos de vida. Pedagogía armonizadora en tres grandes ámbitos: Tecnología, Arte y juegos y deporte. Talleres de teatro para profesores, Congresos, Para lograr un nuevo paradigma educativo con el fin de transformar el mundo. Hay que modificar las metodologías que se emplean para lograr una educación que logre una cultura de paz. La cultura de paz comprende: vales, comportamiento, actitudes. El objetivo es transformar el mundo con una educación activa

Señor, Hazme instrumento de tu paz. Oración simple de San Francisco, con que inició la conferencia de Vicente Botella Señor, hazme instrumento de tu paz. Mística, sacramentalidad y cultura de la paz. La sacramentalidad expresa la mediación entre Dios y la criatura humana. En la experiencia sacramental: Dios es Dios y el hombre es hombre y ahí se da la posibilidad del encuentro real, en unidad, en los signos y en los símbolos. Si el hombre alcanza la unidad en la diferencia con Dios, podrá vivirla con los demás y con la naturaleza. Dinámica de la sacramentalidad, que es el amor, es ponerse en el lugar del otro. Aunque somos libres para aceptarla o no. Cristo al encarnarse sr ha puesto en nuestro lugar. Prójimo es uno mismo cuando se pone en el lugar del otro. Amar descentra y favorece ponerse en el lugar del otro. La parábola del buen samaritano nos cuenta el relato biográfico de la encarnación de Jesús.

Ponerse en el lugar de otro y abrirse a otros puntos de vista. Solo así puede lograrse la reconciliación y la paz. Las divisiones causadas por diversas formas de ver las cosas. Aquí se da la diferencia y parece imposible la paz. El auténtico creyente es sabedora de que la grandeza de Dios se expresa más en la diversidad que en la uniformidad. La Eucaristía es una escuela de vida cristiana porque se da en ella una cristificación y de vida mística. Es creadora de una cultura de la paz, para construir un mundo mejor. La experiencia de la fe debería crear una cultura de la paz. Por eso es tan importante el diálogo entre las religiones para lograr una cultura de paz.

La última conferencia del curso fue de José Mª López, Concepción mística de la paz. La paz divina que es amor, misericordia, justicia. La verdadera paz comporta lucha interior. «La paz no se puede imponer» dice el papa Francisco. Bienestar físico, psíquico y espiritual para tener bienestar personal y social. La paz como el amor es conquista que el ser humano tiene que librar cada día. La paz es un reto. La paz, la alegría y la libertad es fruto de la gracia. La paz no es irenismo. La neutralidad no es posible. Hay que tener convicciones. Lo importante es la forma en que las transmitimos. Si falta la paz física, psíquica y espiritual, no se logra la paz en ninguna dimensión humana. Hay mucho de pseudopaz, que Cristo denunció. Dice Fernando Rielo: «Somos un finito abierto a un infinito». Tenemos hambre de absoluto. La experiencia mística es experiencia de amor. Todo acto de verdadero amor es experiencia mística. Todo ser humano tenemos como virtudes constitutivas: energía (virtud) de creencia, expectativa y amor; que a nivel santificante son: fe, esperanza y caridad.